Siempre hemos oido que una empresa tiene como principal finalidad ganar dinero, y cuanto más, mejor.
Sin embargo, cada vez estoy menos seguro de que eso tenga que ser así. Creo que una empresa tiene que ganar dinero, por supuesto, pero creo que además tiene que cumplir una función social, y tiene que preocuparse por contribuir en la medida de sus posibilidades a crear un mundo mejor. Creo en definitiva que una empresa tiene que crear valor. Valor para el emprendedor, valor para la sociedad, y sobre todo, valor para sus clientes. Sólo creando valor para alguien, la empresa tendrá clientes, y sólo teniendo clientes, la empresa podrá tener un beneficio económico. Y si el emprendedor es capaz de crear valor, haciendo lo que sabe y le gusta hacer, eso le permite sentirse realizado como persona, y ser feliz con lo que hace. Y, si todos tuviéramos un planteamiento así, y creáramos valor, y pudiéramos sentirnos bien con lo que hacemos, no me cabe duda que estaríamos construyendo un mundo mejor. ¿No te parece?.
De todos modos, la respuesta la tienes que dar tú. Cada uno sabrá cuales son sus prioridades, como persona, y en su caso como empresario. Pero...sean cuales sean éstas, no te olvides que para ganar dinero, necesitas tener clientes, y que para tener clientes, tienes que crear valor.
La clave entonces está en crear valor para el cliente, porque si eres capaz de crearlo, comunicárselo, y entregárselo, el cliente está dispuesto a cambiarlo por dinero, y eso te permite obtener un beneficio económico y vivir de tu actividad empresarial.
Pero en realidad, sólo hay una, que es resolver los problemas que tiene tu cliente...
Problemas que le hacen la vida difícil, problemas que necesita resolver, problemas que le impiden conseguir lo que quiere, o conseguirlo como lo quiere, o cuando lo quiere, o donde lo quiere...problemas que requieren atención, problemas que exigen una solución innovadora, porque las soluciones existentes en el mercado, si es que existen, no son satisfactorias para tu cliente.
Es por ello que cuando quieres crear una empresa la clave es encontrar un buen problema que tú puedas resolver con tu talento. Un buen problema que esté pendiente de resolverse, o que esté deficientemente resuelto...
Se trata, en consecuencia de fijarse en un problema que observas que alguien tiene, y que ves que quiere resolver y no sabe cómo hacerlo, y en relación con el cual, tu talento, tus habilidades, tu experiencia vital, y tu iniciativa y capacidad creadora, te permiten empezar a trabajar para tratar de resolverlo encontrando una solución.
Hay que encontrar un problema para resolver, pero no un problema teórico, inventado...sino un problema real, un problema que tiene alguien, que podemos identificar y conocer...hay que situar al cliente en el centro....
Y ponernos a trabajar pensando en él para encontrar una solución que sea satisfactoria para ese cliente, pues sólo cuando lleguemos a tener esto comprobado, tendremos la certeza de que tenemos una primera base para nuestro negocio.
Volveremos sobre este lienzo más adelante, simplemente quiero que ahora lo veas, para que entiendas que el objetivo último de cualquier empresa es crear una propuesta de valor para un cliente, que le resuelva un problema que tiene, entendido como trabajos que tiene que hacer, objetivos que quiere lograr,...y no puede, y descubrir las alegrías, las satisfacciones que se le producen cuando lo logra, y las frustraciones y sufrimiento que se le producen cuando no lo logra, y trabajar para descubrir una solución que le permita realizar esos trabajos o alcanzar esos objetivos, proporcionándole alegrías y satisfacciones y eliminándole o aliviándole las frustraciones y sufrimientos. Y comprobar que la solución, nuestra solución es satisfactoria para el cliente.
En consecuencia, nuestro objetivo ahora, clave del éxito de nuestro futuro negocio, será descubrir un cliente con un problema que nosotros creemos que podemos resolver, y empezar a trabajar duro para resolverlo...
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